5.11.2005

Nada mas molesto que el llegar corriendo a sentarme al retrete y mojarme las nalgas con meados ajenos -en el caso de baños que no son los de mi casa-. Es algo realmente asqueroso. La pendeja soy yo, no quien orina fuera de lugar. Tengo la maldita costumbre de ir casi siempre a orinar cuando estoy al punto de que mi vejiga ya no puede contener mas, razon por la cual tengo que llegar corriendo y ni oportunidad de revisar como dejo el lugar la persona que se sento antes que yo. No me queda mas que decir "Que puto asco"
Definitivamente debo tomar la costumbre de ir con tiempo a orinar y no en las ultimas -y el pantalon ya casi a media pierna en el pasillo en el caso de la oficina-.